lunes, 27 de junio de 2011

Ayuthaya y cosas que hemos aprendido

Poco a poco vamos descubriendo cosas interesantes de este país. La primera y principal es que en Tailandia es muy importante la sonrisa, muchas situaciones conflictivas se pueden resolver simplemente sonriendo. Los tailandeses sonríen continuamente y por el contrario enfadarse causa un efecto fatal en ellos, los descoloca un poco.

Hoy hemos ido a visitar Ayuthaya la antigua capital del Reino de Siam, está declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Es una zona con abundantes áreas arqueológicas y donde está también un Palacio Real de verano que es un combinado de estilos arquitectónicas que se puede calificar de “chocante”. Nos ha gustado más la flor de loto de los jardines

En los jardines hay una bonita manada de elefantes, animal sagrado es este país, hecha con setos recortados


Blanca y Paloma se han tenido que poner el sarong para acceder a alguno de los recintos reales.


Otra cosa que hemos aprendido del país es que la Familia Real es venerada y adorada por los tailandeses y con este tema no admiten bromas, la familia está más cerca de lo sagrado que de lo humano.
Después hemos visitados una serie de áreas arqueológicas Wat Prasisanphet, Wat Mahanat y Wat Chai Watanaram de nombre imposible de recodar y que en su época de esplendor debieron ser maravillosos. Norma nos cuenta que todos los edificios estaban cubierto de oro, el saqueo se lo adjudican a los Birmanos con los que han tenido una historia de “rifirrafes” continuos

Las vacaciones ya se empiezan a notar en los ánimos, aunque todavía no dormimos bien.

Hemos visto la famosa cabeza de buda que esta aprisionada por la raíz de un ficus y sobre la cual hay mil historias y el Buda de Mongkhon Bo Phit de 16 metros de altura


Más cosas que hemos descubierto: la comida thai es deliciosa pero hay que tener mucho cuidado y probar un poco pues a veces pica como mil demonios. Hemos pasado por un mercado y nos ha sorprendido la cantidad de pescado seco que se vende y aunque parezca mentira no olía mal.



De nuevo al vehiculo con Norma y nuestro chofer


Los tailandeses se toman su religión, el budismo, de una forma muy intensa e impresiona verlos en los templos orando y realizando ofrendas
 


También impresiona que al salir del templo todo el mundo encuentre sus zapatos




  
Un par de curiosidades para terminar este dia en el que hemos aprendido tantas cosas curiosas. Primero los tailandeses tienen gustos especiales para los autobuses


Norma dice que cuando llevan extranjeros deben retiras las cortinas que tanto les gustan a ellos. El tigre lo dejan puesto.
Segunda: en los campos de arroz, que por supuesto es el alimento principal, hay una plaga de ratoncillos que se dan el banquete con la cosecha. Los tailandeses le han dado la vuelta a la situación y se comen a los ratoncillos fritos. Los venden en puestos a lo largo de la carretera,son más caros que el pollo o el cerdo ¿os apetece uno?


Mañana más

1 comentario:

  1. Me encanta, cuanto estoy viajando....

    Un saludo desde Vitoria.

    Goio

    ResponderEliminar