miércoles, 6 de julio de 2011

Chiang Mai - Masaje Tailandés

Ayer volvimos a cenar en “Lemongrass” pedimos cosas nuevas y todo estaba delicioso. Las paredes están llenas de comentarios sobre la comida y el restaurante, todos buenos. Blanca pide un rotulador para poner el suyo. Esta noche volveremos, hemos encontrado el sitio, no buscamos más.

Nos hemos despertado a las 8:30 desde la habitación del hotel parece que tendremos un buen día. Chiang Mai parece metido en un bosque por la cantidad de árboles que se ven

Hoy tenemos un día libre de actividad en Chiahg Mai. Ayer por medio de Pern reservamos una sesión de masaje tailandés para tres personas en una autética escuela de masaje. Es importante saber a donde vas, en Tailandia hay mucho masaje mezclado con prostitución y si entras en cualquiera de los chiringuitos de masaje que hay por la calle te puedes llevar una sorpresa. A las 14:00 pasarán a recogernos al hotel y tenemos por delante dos horas de autentico masaje thai.

Cuando hemos bajado a desayunar ya teníamos en recepción el curry verde y los cotizados visados de Buthan impresos en papel. Ya lo tenemos todo, vamos a cumplir un sueño, visitar el pais mas escondido del planeta. Luego hemos salido a comprar una par de cosas pero ha sido imposible repasar la cuenta.

A las 13:45 ya estamos en recepción preparados para lo que sea con nuestro masaje tailandés. Seguro que va a ser perfecto, el sitio es donde van los tailandeses, no es para turistas.

El coche llega puntual en diez minutos estamos en la escuela de masaje. Nos reciben y nos lavan los pies con esencias y limón…… esto promete, empieza muy bien.

A continuación entramos en una habitación con tres colchonetas en el suelo, todo esta limpio y con buen aspecto. Nos dejan una especie de pijama para ponernos…..

Comienza el masaje, estamos los tres sorprendidos y comentando lo que nos hacen a cada uno, vemos que están sincronizadas y van con el mismo ritmo. El resultado increíble, toda una experiencia dos horas de un masaje desde los pies hasta la cabeza. Utilizan manos, brazos, codos, piernas,  todo el cuerpo. A veces me veo en posiciones en las que parece que estoy haciendo judo con mi masajista. Fantástico me asalta la duda ¿podré moverme mañana?
Hemos pasado el resto del día flotando: Paloma y Blanca en la piscina del hotel y yo en la habitación con una sensación de bienestar en el cuerpo y actualizando el blog que llevo retraso acumulado.


Por la noche hemos salido a pasera y  regatear en el animado mercado nocturno de Chiang Mai.


¿y dónde hemos cenado?    Exactamente, acertaste. Qué gente más lista lee este blog.

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